Tengo miedo y no sé de qué,
tiemblo pero no del frío
que siente mi interior,
que encierra mi corazón
en un puño prieto
No quiero pensar en eso,
en aquello oscuro desagradable
que no me da miedo sino desagrado,
que además de desagrado da miedo,
y me envuelve en cenizas
Gris se me vuelve el día
y la noche se hace pálida,
una oscuridad que deja pasar
a los pensamientos venenosos,
que me ensucian el alma
mi alma se ha vuelto esponja
de mugre, de frío y de temor
que desplazan lo que quedaba de amor
hacia las cosas, la vida, mi misma,
y me quebrantan, pobre Yo
Libro: Breves Instrucciones para La Búsqueda del Yo. (Daniel M. Campagne)