Un claro ejemplo de ser resiliente.
Mi tesoro
A pesar de las desgarradoras circunstancias y
de los golpes recibidos,
A pesar del dolor infligido hasta las profundidades del alma,
Aplastada por los acontecimientos y los
avatares de la vida,
Desde lo más hondo de mi corazón
me niego a abandonar
Y permanecer en el suelo.
Puede que me llamen ilusa,
puede que me llamen loca y no esté cuerda.
Con la incertidumbre, los miedos y las sombras
de la duda por compañeros.
Sin importar cuántas veces caiga o me
tiren,
Miraré al frente, me levantaré y seguiré
caminando en busca de mi sueño.
Podrán despojarme de todo,
menos de mi libertad interior y de mi espíritu.
Puedo perder mis bienes, pero jamás
me podrán arrebatar mi patrimonio,
que son mi honor, mi dignidad y mis sueños,
mi verdadero tesoro.
(Viktor E. Frankl).