Detente.
Los árboles al frete y los matorrales a tu lado
no están perdidos.
El lugar donde estás se llama aquí.
y debes tratarlo como un desconocido poderoso,
más debes pedir permiso para conocerlo
y que te conozca.
El bosque respira. Escucha. Este contesta,
ha creado este lugar a tu alrededor,
si te vas, quizás vuelvas otra vez, es decir, Aquí.
No hay dos árboles iguales para el cuervo.
No hay dos ramas iguales para el gorrión.
Si lo que un árbol o matorral hacen se pierde
en ti.
De seguro que estás perdido
Detente. El bosque sabe dónde estás.
Déjale que te encuentre.
-David Wagoner
(De las palabras de un anciano indio americano)