Amistades tóxicas

Antonio Machado

 

Anoche cuando dormía

soñé, ¡bendita ilusión!,

que una fontana fluía

dentro de mi corazón.

Di, ¿Por qué acequia escondida,

agua, vienes hasta mi,

manantial de nueva vida

en donde nunca bebí?

  Anoche cuando dormía

soñé, ¡bendita ilusión!,

que una colmena tenía

dentro de mi corazón;

y las doradas abejas

Iban fabricando en él

con las amarguras viejas,

blanca cera y dulce miel.

  Anoche cuando dormía

soñé, ¡bendita ilusión!

que un ardiente sol lucía

dentro de mi corazón.

Era ardiente porque daba

colores de rojo hogar,

y era sol porque alumbraba

 y porque hacía llorar.

  Anoche cuando dormía

Soñé, ¡bendita ilusión!

Que era Dios lo que tenía            

dentro de mi corazón.   

Virginia Barba – servicio de psicologia

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